El centro CARNEGIE se pasa de la raya con marruecos
BOUBEKRI MOHAMMED YASSER
Una vez más, el think tank americano «Carnegie endowment for international Peace Internship» publica un artículo, que pretende ser periodístico, sobre Marruecos, y en el que recopila una serie de falsedades superpuestas con el objetivo de pintar un sombrío panorama de la situación en Marruecos.
En primer lugar, Carnegie afirma que la salud del rey Mohamed VI es preocupante y que los servicios de seguridad están aprovechando para «ganar terreno». Una acusación completamente falsa. El Palacio Real de Marruecos publica comunicados de prensa, de forma totalmente espontánea y regular (a diferencia de los países que se consideran democráticos), sobre la salud del Rey. Ya se trate de un virus, de una gripe, de una operación de corazón… La opinión pública marroquí está informada periódicamente.
Además, decir que los servicios de seguridad quieren tomar el poder es una acusación digna de un western muy malo. Carnegie debe entender que el marroquí es un ciudadano que ama la libertad, la justicia y tiene un cariño incondicional a su Rey. No hay deriva posible. El pueblo nunca lo permitirá.
La desgracia es que el artículo de Carnegie está firmado por un periodista marroquí, Abdelatif El Hamamouchi, miembro activo de la Asociación Marroquí para los Derechos Humanos (AMDH), conocida por ser de extrema izquierda. Esta asociación financiada con fondos extranjeros se dedica a empañar sistemáticamente la imagen de Marruecos… pero su sede está en Rabat, la capital marroquí y ninguno de sus miembros está en prisión o en el exilio. ¿Es esto un signo de deriva autoritaria? Dejaré la respuesta a esta pregunta a los lectores.