Los ocho bosques más bonitos de España para visitar en otoño

La naturaleza afronta el cambio de estación. La vegetación se prepara para la llegada del frío. Los colores cambian, los matices se multiplican. España cuenta con un rico patrimonio verde que en otoño se transforma en el lugar perfecto para hacer senderismo, practicar la fotografía o, simplemente, dejarse llevar por la magia de los árboles y su entorno.
MUNIELLOS (ASTURIAS)

FRAGAS DO EUME (A CORUÑA)

FAGEDA DE GREVOLOSA (BARCELONA)

ANAGA (TENERIFE)

GORBEA (VIZCAYA Y ÁLAVA)

El espectacular paraje natural de Gorbea se extiende entre las provincias de Álava y Vizcaya, estableciendo un verde manto de árboles (principalmente, hayas y robles) en torno a la cima del monte Gorbea, con sus 1.481 metros de altura. Su naturaleza desbordante y misteriosa esconde todo tipo de actividades: ascenso al Santuario de Oro, apicultora en el Museo de la Miel o remo y vela en el embalse de Ullibarri-Gamboa son alguna de ellas. Se puede reservar alojamiento aquí.
SELVA DE IRATI (NAVARRA)

Sólo la Selva Negra alemana puede presumir de ser un hayedo-abetal más extenso que este bosque de 17.000 hectáreas. Pese a ser explotado forestalmente desde el siglo XV, ha logrado conservarse en plenitud gracias al buen hacer de los habitantes que viven en sus valles, en pueblos que parecen sacados de un cuento. Hayas, robles, abetos, abedules, sauces, helechos y musgos sirven de morada para ciervos, corzos, jabalíes y multitud de habitantes más que aportan a este entorno una gran riqueza medioambiental. Mención especial merece su consideración de Zona de Especial Protección de Avifauna, con pájaros carpinteros, pitos negros,quebrantahuesos, halcones peregrinos y águilas reales. Se puede reservar alojamiento aquí.
LOS ACORNOCALES (CÁDIZ)

Presume de ser el bosque de alcornoques más grande de España y el mejor conservado de Europa, y a quien lo visite no le cabrá ninguna duda de que se encuentra en un lugar único. Más de 170.000 hectáreas entre Cádiz y Málaga dan buena cuenta de su riqueza en flora, fauna, climatología, historia y folclore: los neandertales dejaron constancia de su paso con pinturas rupestres en distintas cuevas mientras que la naturaleza hace que en él los alcornoques formen auténticos bosques (del que se sigue sacando el corcho) acompañados de una rica vegetación, rica en helechos, laureles, sauces y fresnos.. Se puede reservar alojamiento aquí.
ORDESA (HUESCA)

El valle de Ordesa es el paraje más emblemático y visitado del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, además de uno de los primeros espacios protegidos de Europa (el 1918). Pero a su alrededor atesora una biodiversidad de valor incalculable que en otoño se muestra en todo su esplendor: hayas, abedules, quejigos, pinos royo y tremolines viven una explosión de colores ocres, amarillos, rojos y marrones en contraste con los verdes bosques de abetos. Se puede reservar alojamiento aquí.